Esta semana nos hacemos "eco" del informe publicado en nota de prensa por parte de Siemens España, basado en un estudio que esta empresa ha realizado, evaluando más de 200 datos de la ciudad de Madrid con el objetivo de identificar las principales causas y medidas capaces de disminuir las emisiones contaminantes y mejorar, con ello la calidad del aire de la capital española.
El enfoque del análisis ha tenido en consideración los objetivos ambientales del ayuntamiento tanto para el año 2020 como para el 2030 con la intención de determinar cuáles son las tecnologías más eficaces para lograrlos y sobre todo, con el mayor beneficio posible para la calidad de vida de sus ciudadanos, los turistas y todo aquél que en determinados días tenemos que pasar por la citada ciudad por tema trabajo u ocio.
Como principal conclusión del estudio, citar que el transporte y los vehículos generan el 41% de las emisiones de gases de efecto invernadero, siendo este dato muy superior a otras ciudades europeas, en las que también se ha desarrollado este estudio.
Por ejemplo, el transporte en Copenhague genera el 20% de este tipo de polución y el transporte en Helsinki genera el 32%.
El informe destaca también que 7 toneladas métricas de CO2eq se relacionan al transporte de vehículos privados, resultando sólo el 20% producido por los vehículos de transporte público o colectivo (buses y taxis). Esto deriva que Madrid tiene una calidad del aire, podríamos decir, deficiente ya que los coches son los responsables del 80% de los contaminantes PM10 (partículas) y Nox (Oxidos de Nitrogeno), bien conocidos por su daño a la salud humana, el clima y los ecosistemas.
A resaltar las soluciones del informe:
- Peajes urbanos (similar al empleado en la actualidad en la ciudad de Londres)
Con esta solución, según el informe se reducirían las emisiones en un corto plazo un 20%. Otro tema es lo que le ocurriría a los bolsillos de todos los que tenemos que llegar a nuestro puesto de trabajo día tras día.
- Transición de los vehículos a combustibles alternativos.
Esta es la segunda opción posible que contempla el estudio, consistiendo en lograr la transición a combustibles alternativos del 100% de los autobuses públicos, un 70% de los taxis y un 20% de los coches privados a vehículos.
Por otro lado, mientras muchas empresas observan este tema de forma pasiva, nosotros desde Combustibles Alternativos Automoción seguimos transformando vehículos, construyendo estaciones de gas vehicular y capacitando talleres en nuestra zona de influencia. Ya llegarán las grandes acciones y los incentivos catalizadores del cambio...
Tomemos ejemplo y avancemos en este sentido. Una cosa es segura, de esta forma el mundo no irá peor, ¿verdad?
RedactorCA
