Acaba el año y antes de comenzar con los presupuestos del 2017 toca resumir lo acaecido en este periodo. No todo son números y por ello, en nuestra mente nos aparecen clientes, en definitiva, personas.
Pero aunque tras repasar mes a mes, todos están en nuestra memoria, nos gustaría resaltar aquellos arqueotipos de usuarios que nos han llevado al límite, y gracias a ellos hemos aprendido y mejorado en nuestro negocio.
El primero a resaltar es "el perfeccionista". Este tipo encuentra siempre el punto exacto en las revoluciones donde se aprecia un sutil tirón, en esa marcha específica. Además, escucha ese mini-ruido durante la conducción que antes no lo hacía, casi inapreciable, pero te demuestra que necesitas una fijación más en las tuberías que llegan al filtro. Al final, su gran especialidad como probador profesional hace que dejes la instalación perfecta y lo más importante, te enseña a que tu red de talleres, a partir de pasar su test, realice instalaciones impolutas, por encima de la media.
Como segundo perfil, encontramos "el dejado". Le entregas el coche transformado y simplemente sigue funcionando como lo hacía antes de la conversión. Pasaron de la era analógica a la digital sin leer un manual de uso. Sus consultas te hacen verificar todo de nuevo, consultar al fabricante que te suministra los kits desde Europa e incluso pedir una segunda opinión en el taller de Madrid dónde más se transforma de España. Al final, tras hacerte sudar sangre, te das cuenta que te ha ayudado a crecer, te ha enseñado.
El tercero en discordia es "el profesional", cliente que utiliza el vehículo, ese vehículo específico habilitado para trabajar, como el resto de herramientas; es decir, para este tipo de usuario el coche es como el martillo, el taladro y el ordenador, otra herramienta para dar servicio a sus clientes. Por tanto, mira las posibilidades de ahorro que la herramienta les ofrece y la flexibilidad de trabajar cualquier día, en cualquier ciudad, independientemente de protocolos por contaminación (ver el protocolo de Madrid actualizado en Enero del 2016 pinchando aquí).
Por último, y no por ello menos importante, encontramos a "el Guadiana", que aparece y desaparece como el famoso río de nuestra zona de influencia. Siempre tiene lío, pero cuando saca un tiempo para pensar en el futuro, te llama por teléfono: tiene claro que quiere el producto, cierra la operación, lo paga y se pone a usarlo inmediatamente. Lleva en rueda muchos negocios, pero ha visto en el nuestro una posible diversificación para su futuro crecimiento; y medios comerciales y técnicos no le faltan. Te acelera el aprendizaje y te da volumen.
Todos, distintos en comportamientos pero iguales en importacia están a día de hoy muy contentos. Saben que son del reducido grupo que pueden decir bien alto
#yoahorroel40 ¿y tú?
además de estar siendo respetuosos con nuestro planeta.
Por nuestra parte, sólo nos queda decir a estos clientes GRACIAS.
Os deseamos una FELIZ SALIDA DE AÑO y un PRÓSPERO AÑO 2017
RedactorCA