Parece que el 2050 es un año muy, muy lejano, pero si tienes dos hijos en torno a los 10 años en ese año no saltarán los 45. Y eso significa que tu generación estará todavía, Dios Mediante, cuidadando de sus nietos.
Eso nos hace pensar que el cambio en la movilidad y las acciones para evitar el calentamiento global depende de nosotros desde ya. Mañana es tarde.
Sabemos que el 70% de las emisiones globales de CO2 se deben a la combustiòn de los comustibles fósiles, de los que el transporte es el responsable en casi un 25%. Además, se estima que el planeta tendrá 5ºC más si no lo remediamos en menos de tres partes de un siglo y ésto traerá consecuencias desastrosas para, principalmente, nuestra especie.
Por otro lado, se estima que para el año 2050, al ritmo actual de crecimiento en ventas de vehiculos, se comercializarán un total de 120 millones de coches, siendo el parque rodante de unos 2.000 millones.
¿Es sostenible que todos quemen combustibles tradiciones?
¿Nuestros hijos sobrevivirán respirando un aire peor que el que nos tragamos hoy en nuestras grandes ciudades?
Hay que actuar desde hoy. Desde la compra de los nuevos vehículos, tanto si son para uso particular como profesional. Y conocer otras maneras de suavizar el problema, como la transformación de vehículos a los que no les ha llegado la hora del cambio, para que puedan circular minimizando emisiones de CO2 e incluso eliminando NOx y partículas. Sabemos que la responsabilidad compartida nos hace esperar a que otros prueben, se inicien; pero con este sistema, puede que algún día alguien o algún desastre ambiental nos recuerde lo peor. Puede que para entonces sea demasiado tarde.
Toca pensar en cambio a GLP, cambio a GNV, cambio a híbrido y/o a eléctrico (si los recorridos y el bolsillo lo permiten). Puede que caminar o realizar recorridos en bicicleta sean posibles para desplazamientos que hoy hacemos quemando combustible fósil, de ese que nos está matando. Sólo así se conseguirá un parque móvil lleno de híbridos, eléctricos y combustibles alternativos (GLP, GNV, H2) por encima del 90% para ese CERCANO 2050.
Recordar en este punto que el 50% de la población mundial vivirá en un 3% del espacio disponible en la Tierra, agrupados en las grandes urbes, por lo que un buen diseño de elementos de movilidad y soluciones tecnológicas se hacen indispensabes en el ámbito local. La electrificación sería buena para la bajada de emisiones, pero debemos pensar no sólo en los tubos de escape, sino en las emisiones de CO2 en la generación de la energía eléctrica (emisiones completas, del pozo a la rueda, recuerden). Sólo si es generada mediante fuentes renovables caería al 3% sobre las emisiones actuales; hoy, por los procesos actuales de generación se queda en un 65%, lejos de ese idílico casi cero%.
Toca trabajar y avanzar mucho en el almacenamiento, coste de las baterías, reservas de Cobalto y Litio, hibridación 48v, Pila de hidrógeno, etc.., etc...
Por otro lado, mientras muchas empresas observan este tema de forma pasiva, nosotros desde Combustibles Alternativos Automoción seguimos transformando vehículos, construyendo estaciones de gas vehicular y capacitando empresas del sector de automoción de toda España. Ya llegarán las grandes acciones y los incentivos catalizadores del cambio...
Tomemos ejemplo y avancemos en este sentido. Una cosa es segura, de esta forma el mundo no irá peor, ¿verdad?